A través de los siglos, Río se convirtió en el centro más importante de Brasil, y en 1822, con la proclamación de la independencia de Portugal, la ciudad se convirtió en la capital del nuevo Imperio del Brasil. Río fue la capital de Brasil hasta 1960, cuando fue sustituido por Brasilia, ciudad moderna fundada para la ocasión.
Actualmente, con sus 6,3 millones de habitantes, Río de Janeiro es la segunda ciudad más grande del país con respecto a la población despues de São Paulo, además de ser uno de los lugares más visitados en todo el Brasil, gracias a su monumentos y muchos eventos folclóricos, entre los cuales el gran Carnaval.
El símbolo de Río de Janeiro es sin duda la enorme estatua del Cristo Redentor, situada en la cima del Corcovado, desde cuya cima se puede admirar una hermosa vista de la ciudad.
En cuanto a los monumentos, Río tiene un gran patrimonio, herencia de su pasado glorioso. El corazón de la ciudad es la Plaza Floriano, desde donde comienza la Avenida Rio Branco, la calle mas glamurosa de la ciudad.
En el centro de la ciudad se puede admirar la Catedral, la Biblioteca Nacional, el Teatro y el Museo de Bellas Artes entre otras cosas. Al sur de la ciudad esta el antiguo barrio de Santa Teresa, un excelente ejemplo del pasado colonial con sus edificios que datan de la Edad Moderna. En relación con el folklore, cabe destacar el gran carnaval.
Rio de Janeiro es una ciudad que vive del futbol. Son muy conocidos los diversos derby de la ciudad entre los equipos de Vasco da Gama, Flamengo, Botafogo, Fluminense. La final de la Copa del Mundo de 2014 se jugará en Río de Janeiro, en el estadio de Maracaná.
Para llegar a la ciudad desde Europa se puede hacer desde el aeropuerto internacional de Río de Janeiro-Galeão. La mejor manera de moverse por la ciudad es alquilar un coche.